lunes, 8 de junio de 2015

N° 313 - LA "REFORMA ESTATUTARIA".....

UNA PRUEBA MÁS DE "LA INTELIGENCIA EN ACCIÓN":




La "Comisión de Reforma Estatutaria" que preside el Ing. Aramayo Pinazo y que esta integrada, por el hasta ahora candidato guerrillero a la Secretaría General Nacional, Don Rafael Vásquez Neyra, informa en su pre dictamen, que  han desarrollado un arduo trabajo, que poco falto para que  se reunieran con el Presidente de la ONU, con el Tribunal de Justicia de la Haya y con el Papa, y aunque no lo dicen, queda claro, que si no lo han hecho  -si no se han reunido con tan ilustres personajes- ha sido porque les falto tiempo ante el gran esfuerzo intelectual desplegado en el encargo. 

Pero la mera verdad, es que a pesar de "tan esforzado trabajo", lo concreto y lo real, es que el documento tiene un sesgo conservador, es más de lo mismo, un refrito que busca que la cúpula partidaria, siga teniendo el control de partido -sobre todo cuando se restringe el ser delegado en convenciones a miembros del Plenario Nacional que son por lo general direccionados- para que solo ella (la cúpula) pueda seguir rotando en los cargos y mandando en Paseo Colón.

El Proyecto no implica una verdadera democratización partidaria, ni una nueva dinámica en las formas y maneras de hacer política; independientemente de que el sectarismo y el verticalismo, sigue manteniendo los parámetros de hace sesenta años, en un mundo que ha cambiado y frente a una realidad democrática  que también ha evolucionado. 

En principio, estamos frente a un documento que es una prueba más que éste es el partido de "la inteligencia en acción". Que no hay voluntad de cambiar la estructura de un movimiento anclado en el pasado, en el que se quiere seguir manteniendo los privilegios de una cúpula, que hace rato ha perdido legitimidad y credibilidad. En ese contexto, no hay posibilidad ante lo que se presenta a la militancia, que como partido este se reencuentre con el pueblo, que se avizore  un futuro prometedor; y queda claro, que de lo que se va a seguir padeciendo hasta el final de los tiempos, es de las corruptelas, los enconchabamientos -en función de determinados intereses- y las argollas de siempre, donde la capacidad política y la solera intelectual, es desplazada por el oportunismo de los mediocres, de los demagogos y de los aventureros, que tienen un papel protagónico, en el perfil de lo que es hoy ACCIÓN POPULAR.

Si se trata de actualizar el estatuto del partido a la realidad de la hora presente, hablar o reiterar en la "Declaración de Principios", de "construir una democracia integral como sistema de vida, pensamiento y organización, basada en la creación cooperativa de la riqueza y en la distribución equitativa de la renta nacional, a fin de que todos los peruanos puedan disfrutar racionalmente de los bienes y servicios puestos a disposición de la colectividad. Esto quiere decir que la democracia política debe sustentarse en la democracia económica y social, con el fin de asegurar una real y justa participación en el goce de la riqueza producida en común". Es sin ambages, insistir en el discurso político de hace sesenta años, ignorar que el cooperativismo basado en los viejos dogmas de Roshdale, no pueden aplicarse en el mundo de hoy y que si se insiste en la vieja receta cooperativa, lo menos que debieran explicar, es cual es la filosofía y como se aplica esa nueva visión cooperativa que se pretende implementar en la hora presente. 

Para mayor abundamiento, hoy en el Perú lo que impera es un mercantilismo -que se vende  como si fuera neoliberalismo-  del que es promotor uno de sus principales líderes al hablar de "emprendedores y emprendimientos",  cuando antes que el lucro, lo que se necesita es una clase media pensante que rediseñe el rostro del país. Si se habla de "distribución equitativa de la renta nacional" por ejemplo, se esta negando, el actual sistema de canon. En esa dirección, en un país donde la política va por un lado y la economía por otro, sin redefinir la democracia de la hora presente, se repiten los viejos formulismos que consideraban como un todo la "democracia política, la económica y la social" . 

En concreto y ante la limitación de espacio para un mayor análisis, no se ha tenido la amplitud de criterio de elaborar una declaración de principios adaptada a la actualidad y al drama que vive el país frente a la corrupción y a la violencia. En el caso de las des afiliaciones, es una pena que hayan consultado hasta a  Diego Maradona y que contrario a ley, pidan carta notarial y pago, cuando la Ley de Partidos Políticos, indica carta simple, copia al JNE y sin costo salvo para dirigentes.

Resulta absurdo, que como el papel aguanta todo, se exprese que es un derecho, que el militante "participe en la línea política del partido" sin que se establezcan mecanismos en el estatuto para ello, porque la línea política del partido, es  en un partido mudo, a capricho de quienes detentan el poder y fundamentalmente, de los congresistas por la función que ocupan. 

Es caricaturezcamente antidemocratico, que se considere igualmente "un derecho", denunciar cualquier acto que contravenga las normas del estatuto, reglamentos o principios éticos que rigen a Acción Popular, únicamente ante el órgano de resolución de controversias del Partido y sus instancias superiores, en un partido sin institucionalidad y donde se actúa por consigna y por interés personal o de grupo. El partido no es una isla, la arquitectura jurídica nacional esta por encima de la normatividad partidaria. Se constituyen igualmente, "Tribunales Arbitrales", sin árbitros calificados, caricaturizando la institución como se ha caricaturizado y materializado un remedo de la Defensoría del Pueblo, para crear la "Defensoría del Afiliado", donde hoy hay un figuretti que no defiende a ningún militante, que se abstiene en decisiones abiertamente antidemocráticas y donde no ha habido una sola gestión que defienda realmente los derechos de los afiliados sin proteger el statu quo y sus propios intereses.

En un partido con la realidad que se sufre en el día a día, resulta ofensivo a la inteligencia jurídica, al sentido común y a las formas de la democracia; que se niegue cualquier posibilidad de discrepancia; que esta antidemocrática negativa, se ponga en blanco y negro, sin evaluar el peso ante la opinión pública. Es igualmente vergonzoso, que se ponga en blanco y negro, el que se considere "un derecho" del militante el que "lo contrate" quien obtiene un cargo público. El clientelismo político partidario sin sonrojo.

Para terminar  esta primera parte, de un análisis que no pretende ser exhaustivo, pero si planear sobre un documento, que debería ser el eje de un renacimiento partidario. Es necesario indicar, que no es lo mismo un nuevo estatuto que implique democracia real y efectiva, criterios de dinámica y de acción política regionales e igualdad de oportunidades, que un documento maquillado, parchado, que mantiene privilegios y viejas formas de hacer política, que favorecen a una cúpula cuyo único norte es su propio beneficio e interés.