sábado, 26 de julio de 2014

N° 291 - LA "ABSTENCION" ACCIOPOPULISTA

EL VOTO QUE SI SE PIERDE:


Escribo estas líneas, tras el primer conteo de votos para la elección de la Junta Directiva del Congreso, donde ninguna de las dos listas obtuvo la mayoría requerida y donde el voto de la bancada del partido, fue de "abstención". Y lo primero que tengo que decir es que ese voto de abstención favorece al oficialismo, a un "oficialismo" que le da a nuestros congresistas tribuna y publicidad a través de los medios de comunicación del estado y determinadas facilidades para su trabajo parlamentario, porque por más que quieran dar la imagen de "oposición". Lo concreto y lo real, es que estamos más cerca -y votamos- con el oficialismo y no con la oposición; y por eso ante la opinión pública y la prensa especializada, somos considerados una especie de "satelites" del oficialismo.

La razón para el voto de abstención, ha sido según el Congresista Mesías Guevara, vocero de la bancada; que "un acciopopulista no puede votar nunca por un aprista o un fujimorista", que "con el fujimorismo ni a misa"; que el PPC ha sido parte de la mesa directiva, que ellos han sido "oficialistas" y por tanto, el voto de los congresistas de ACCIÓN POPULAR es de "abstención". Frente a ese voto, hay que apelar a esa lampa que esgrimen nuestros congresistas y que dicen tener cerca del corazón. Hay que recordar a ese Fernando Belaunde del que se dicen seguidores nuestros parlamentarios; a ese FBT por el que se rasgan las vestiduras y que nunca fue un radical ni un político sectario. Fue un hombre siempre dispuesto al dialogo democrático, a la generación de consensos, a entender que las diferencias en política nunca son irreconciliables cuando de lo que se trata  es de buscar  el beneficio del país.

En principio, si la  democracia es consenso, si la democracia es respeto a la voluntad popular. Si la democracia y la practica político parlamentaria, obliga a buscar lo mejor para el país y no lo que es más conveniente para los intereses de los congresistas; no se puede deslegitimar la presencia del Fujimorismo, ni del APRA, ni del PPC en el parlamento; todos tienen un mandato y una representación popular, todos tienen algo que nosotros por ser una cueva de intereses personales no tenemos: Una estrategia como colectivo. Y en ese contexto, estamos obligados a pesar de nuestras diferencias, a conciliar, a votar en un determinado sentido si de buscar lo mejor para el país se trata. Lo otro es entender la democracia como un escenario de posiciones irreconciliables, donde el cavernicolismo, el sectarismo y el odio político prima. Y en ese escenario de divisiones irreconciliables, no gana el país. Ganan en un país de ignorantes, en un país donde no hay cultura cívica ni política, en un país donde los antis son fuertes; los que alientan la rivalidad, la inquina y venden una visión, de que en la política se enfrentan los buenos contra los malos. Los que tienen como Guevara (según sus propias palabras)  a "dios" como guía y mentor de sus pasos en política y los "corruptos" que responden  al Belcebu fujimorista o aprista. Con el agravante que, ni los mismos militantes conocen las prerrogativas y funciones de la mesa directiva y entienden en medio del radicalismo, la desinformación (y falta de formación política) y sectarismo, que de lo que se trata, es  de un botín para exculpar al adversario político y no de una agenda parlamentaria en beneficio del país.

Y como no hay partido y la bancada parlamentaria es un poder que no solo no responde a ningún mandato imperativo, sino  que actúa independientemente de un partido que no existe, porque no hay institucionalidad, porque el Secretario General Nacional es una caricatura de dirigente y porque los Del Águila en el poder, están más preocupados en su proyecto propio, como lo están los Congresistas por su reelección. Queda claro, que la candidata oficialista no es lo mejor que le puede pasar al país. Que la Sra. Solorzano es una mujer sin brillo ni ejecutoria política, que responde solo a los intereses y al poder que acumula la Sra. Nadine Heredia; que en la recta final de un gobierno que va a endurecer sus posiciones; obliga a tener un Congreso con una Presidencia de oposición que responda al equilibrio de poderes y que no sea una mesa de partes del ejecutivo.

Finalmente gano la lista del gobierno y el único que fue "coherente" con su dicho, por llamarlo de alguna manera y mantuvo su "abstencionismo" fue Lescano. Seguimos siendo un partido de "oposición". Los "institucionalistas" dirán que hemos contribuido en la segunda votación,  a la "gobernabilidad" del país. Así como tenemos en la interna candidatos a la alcaldía, con sentencias de violación, fe pública y otros delitos, es decir con un prontuariado curriculum vitae, vamos a tener un Congreso con una señora presidenta, cuyo mayor mérito político es ser incondicional de la pareja presidencial y un Primer Vicepresidente que fue suspendido por  favorecer la contratación de su hijastra. Son los tiempos de la política peruana, Tiempos en los que algunos despistados dicen que seguimos siendo un "partidazo". Que ligados a las granjerías que da el poder.....seguimos siendo, la "Reserva moral del Perú"

P.D: Al cierre del presente artículo, Lescano declaro que hay miembros de AP-FRENTE AMPLIO que votaron por la lista oficialista. Y el Congresista Mesías Guevara reconoció públicamente que voto por la lista oficialista. Su argumento  fue que se corría el riesgo que la acusación constitucional contra Alan García, la investigación a Orellana y de la Centralita tuvieran un manto de impunidad. Esa afirmación de Guevara, se sustenta -una vez más- en manipular el antiaprismo y el antifujimorismo; en aprovecharse de la ignorancia del pueblo para llevar agua para su molino y ganar notoriedad; además de ello, Guevara ofende la inteligencia ajena. Los temas de agenda no responden exclusivamente a la Junta Directiva; responden al Consejo Directivo, al Pleno y a la Junta de Portavoces, que tienen el número de votos de sus representantes. Guevara voto por la lista oficialista, porque defiende sus propios intereses. Porque el Comité Político no existe.

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