sábado, 28 de febrero de 2015

N° 307 - LA CATEDRA BELAUNDE

SUS "DOCTORES"...... SUS "LIDERES" Y SUS CONTENIDOS (PARTE I):



El Presidente  de ACCIÓN POPULAR, Congresista Don Mesías Guevara Amasifuen, ha impulsado la "Cátedra Belaunde" , un espacio para la capacitación y el conocimiento, donde se hace semanalmente docencia política, a través de charlas o disertaciones de diversos personajes, sobre temas igualmente diversos. 


La iniciativa como concepto, es positiva, en un partido donde mayoritariamente -por lo que se puede leer y percibir en los foros- los militantes no tienen formación política ni mayores conocimientos; y actúan en sus actos y acciones políticas generalmente -antes que con lógica y razón- de manera emocional o amical, defendiendo sus intereses, sus "lideres" y un statu quo partidario que solo beneficia a unos cuantos.

Sin cuadros calificados, y capacitados, sin militantes formados en la defensa de los grandes intereses nacionales. Sin ciudadanos que entienden la política con una visión de país; como la ignorancia es audaz, lo que se tiene en la interna partidaria, es como masa, gente manipulada, ignorante, oportunistas, aventureros o ingenuos; inmovilismo político y una crisis permanente, que los ubica de espaldas al electorado. Que hace que el ciudadano común y corriente le de la espalda a los partidos políticos y no quiera saber nada con los partidos tradicionales, en una crisis de representación, que estos parecen ignorar por el ejercicio -y su desmedida ambición- de poder.

En el contexto anterior, en los predios de Paseo Colón,  se llevo a cabo una conferencia dictada por el Historiador Marcos Garfias Dávila, investigador del INSTITUTO DE ESTUDIOS PERUANOS (IEP) con doctorado por el COLEGIO DE MÉXICO (CM), que es una de las instituciones de estudios sociales más importantes de latino américa. El doctor Garfias, que se presento como proveniente de las canteras de la UNIVERSIDAD NACIONAL MAYOR DE SAN MARCOS (UNMSM), se identifico como "militante" de ACCIÓN POPULAR de la base de Comas, en una conferencia que llevaba por título "DE LA IDENTIDAD NACIONAL A LA IDENTIDAD PARTIDARIA". Una conferencia  en la que después de los cumplidos y loas a Guevara, se pasa a las presentaciones a los "doctores" ,"doctoras" y "personalidades" que  presidian la mesa -entre los que no podía faltar el figuretti del "Defensor del Afiliado"- para entrar a una charla en la que se percibe, antes que honestidad intelectual y conocimiento, una conferencia con una serie de inexactitudes y marcada por el propagandismo político; algo que resulta inaceptable en lo estrictamente intelectual y  que terminan distorsionando el objetivo de la cátedra.

Ante esa situación, ante afirmaciones bastante "singulares" del Presidente de ACCIÓN POPULAR, invite a debatir al Dr.Garfias por los foros partidarios, en el entendido que como intelectual, como profesor universitario, como investigador, va a priorizar el debate y la confrontación de ideas. Y para mi sorpresa no recibí respuesta.

Ante su negativa, aquí están sobre el papel mis objeciones a una charla en la que reafirmando mi dicho -sin alusiones personales- de que "en éste país cualquier burro es doctor"; creo que el papel del intelectual o del seudo intelectual en la política no debe ser la del calculo político, la del ayayero, la del vocinglero o la del publicista del político, sino que tiene que seguir el camino de la honestidad intelectual, de la racionalidad y el de la búsqueda de la verdad.

En principio, es necesario indicar que el Dr. Garfias, abre su conferencia expresando que tras conversar con Mesías Guevara Amasifuen, sobre Lima; se enfocan ambos en el libro de Sebastian Salazar Bondy "LIMA LA HORRIBLE" e ilustra al auditorio en el sentido de que "Lima la Horrible" es un libro en el que, el título se recoge del hecho de que las olas de migración que llegan a Lima criolla, hacen "horrible" a la ciudad; a una Lima aristocrática, blanca, criolla intolerante a la migración andina en la década de los cincuentas.

Pero "LIMA LA HORRIBLE" no tiene que ver solo con la migración andina -con el rechazo a la migración andina-, con el hecho de que la migración andina la hace "horrible". Que el político con poder, que el Congresista de la República, crea que eso es el libro interpretando el título.....y que el supuesto intelectual le siga la cuerda es otra cosa. 

El libro de Salazar Bondy, cuyo titular se recoge de un poema de César Moro en "LA TORTUGA ECUESTRE"  (*) y que no tiene absolutamente nada que ver con relación a que lo andino o lo cholo la hace horrible; tiene que ver más bien con la ciudad, su cultura, su arte. Con el deterioro moral de sus gobernantes y sus ciudadanos. Con la presencia de las micro-sociedades que la marcan hoy en día. Esa forma de interpretar las ciudades latinoamericanas con originalidad es lo que hace importante a la obra. Esos lastres de los gobernantes, ese limeño metiche, chismoso, pasivo, huachafo, es lo que hace "fea" u "horrible" a Lima. 

Entender  la obra solo a partir de los cambios demográficos y urbanos de los cincuentas, sin sus connotaciones estéticas; presentarla e interpretarla desde la simple perspectiva del rechazo al migrante andino, es no solo una grave equivocación, es de un preocupante simplismo que no tiene rigor intelectual. "LIMA LA HORRIBLE" es mucho más y no la equivocada forma de presentar un libro trascendental.......es  finalmente....una invitación a leer el texto y a sacar sus propias conclusiones........(este análisis continuará).....  


(*)  para decirme que aún vivo 
      respondiendo por cada poro de mi cuerpo
      al poderío de tu nombre o poesía
      Lima la horrible.
                                                                                   Cesar Moro

 LA TORTUGA ECUESTRE


viernes, 13 de febrero de 2015

N° 306 - EL "PLAN DE INACCIÓN" DE GUEVARA

EL PLENARIO DE MARZO:


El hombre que pretende ser el discípulo más aplicado de Paniagua; el político que asegura trasuntar "por el camino de Belaunde"; el líder que ha jurado que ACCIÓN POPULAR va a volver a ser el partido aluvional de los tiempos de FBT; el Congresista de la República, que se ha convertido en el ideólogo, maestro, guía y sumo sacerdote, de un partido que dice ser "La reserva moral del Perú". El político que llego meteoricamente a la Presidencia de un partido, donde las "vacas sagradas" pastaban tranquilamente; el militante providencial para el futuro de un partido moribundo, que afirma con convicción,  que no es una simple coincidencia, que su padre le haya puesto por nombre "Mesías"; no se ha inscrito todavía en el JURADO NACIONAL DE ELECCIONES (JNE) como Presidente del Partido Político ACCIÓN POPULAR.

Y el Ing. Mesías Guevara Amasifuen, no se ha inscrito todavía ante el ente electoral, porque en realidad; la elección en la que participo derrotando al sector "aristocrático y familiar" del partido, priorizo el poder a la institucionalidad. Porque la elección se llevo a cabo, en medio de reglas de juego que no eran compatibles con la ley de partidos políticos y porque arrastraba una serie de leguicidios y vicios de nulidad estatutarios que Alva Orlandini y Edmundo Del Águila  impulsaron, en un partido donde quien tiene el poder, hace lo que quiere, lo que le conviene o lo que puede, sin importar el respeto a la ley o la institucionalidad.

En ese contexto, el Congresista Guevara, en sus primeros dos meses de gobierno, en lugar de darle dirección al COMITÉ EJECUTIVO NACIONAL (CEN); en lugar de reorganizarlo, de acabar con la crisis de liderazgo de ese fantoche dirigencial que se llama Kessell y Cía, permite que éste ni siquiera sesione, lo deja parasitar, que se agudice la crisis. Que Alan Kessell siga maltratando a la gente -a la que él también huevea- ofreciendo intervenir donde (lo que esta haciendo) es mirar a otro lado. En suma, Guevara en sus dos primeros meses de gobierno, es el artífice de que todo siga igual. 

El hombre del supuesto cambio; el ideologo maestro y guía de las raleadas "juventudes acciopopulistas", ignora que la política es ilusión. Que su elección era -aunque ingenuamente- sinónimo de modernización,  de renovación, de cambio. De todo ese discurso político que él acuña, comenzando por el "camino de Belaunde" que supuestamente conoce mejor que nadie en los predios de Paseo Colón.  Y lo singular y lo triste de todo esto, es que "el programático" Ingeniero Guevara, quiere vender a la militancia, la idea de que la "Cátedra Belaunde" es el cambio, de que "un militante un voto" es el cambio; De que "la escuela de líderes" es el cambio. 

Guevara en el primer plenario que le toca presidir, omite deliberadamente su "Plan de Acción", el mismo Plan de Acción que ignoro Alva Orlandini, el mismo que Vitocho no difundió, en un partido donde nadie habla de propuestas ni de programas y donde todo es interes personal, cubileteo, candidatitis. El "pisco y la  butifarra" de antaño que se convierte hoy en día en  chinesse food. El tiempo dirá finalmente, si el único Plan Acción de Mesías Guevara, era "militantemente" la presidencia del partido.........y la reelección congresal.


domingo, 1 de febrero de 2015

N° 305 - LA REFORMA ESTATUTARIA

ENTRE LA COSMÉTICA POLÍTICA, LAS REFORMAS DE FONDO
Y EL NACER DE NUEVO:




La  COMISIÓN DE REFORMA ESTATUTARIA del partido, ha publicado en los foros un aviso, en el que invitan a hacer propuestas a la militancia, anunciando que van a hacer "Encuentros Descentralizados Marco Regionales y Zonales" en Lima y en todo el país y que se recibirán propuestas sobre la reforma estatutaria. Y mi primera reflexión al respecto, es que en un partido que no se caracteriza por un a militancia programática, donde no hay cuadros técnicos de liderazgo y primer nivel, con presencia significativa en el aparato estatal o en la empresa privada, una directiva de esta naturaleza. Cuando la iniciativa de poner la reforma  en tablas; cuando la capacidad de mostrar su talante programático y la convicción y seguridad de lo que hay que hacer, depende del Congresista Mesías Guevara, -actual Presidente del partido- significa tener al frente una "invitación", que si no resulta demagogica, es poco acertada. Y lo anterior, porque es la abierta contradicción de una supuesta dinámica de  gestión, que  va a generar un cambio en el partido, para que vuelva a ser como lo dijo Guevara, el "movimiento aluvional" de tiempos de Fernando Belaunde.

El soplarle una vez más la pluma al militante, resulta no solo preocupante y pintoresco, sino que responde, al permanente juego pirotécnico, de gestos e imágenes de quienes ejercen el poder en los predios de Paseo Colón. En la filosofía contemporánea la Prospectiva, es la disciplina que nos ayuda a construir el futuro, a considerar el futuro, como un asunto pendiente, como un tema por desarrollar o por materializar. La Prospectiva implica una revolución del pensamiento, en el que el hombre es un actor y desde la perspectiva política, un constructor de -por llamarlo de alguna manera- un país mejor. 

Esa construcción "prospectiva" del futuro, esta ligada a tres pilares básicos, el de la libertad, el del poder y el de la voluntad . En el caso de  ACCIÓN POPULAR, somos un partido que desde el poder continua anclado en el pasado, sin capacidad de reconstruirnos o de construir un futuro como partido, que de paso a una visión de futuro de país. Se repiten postulados ideológicos y filosóficos ya superados, se mantiene una estructura partidaria que privilegia a las cúpulas enquistadas alrededor del poder; se carece de una visión de partido moderno, de país y de presencia en los grandes temas de la agenda nacional, lo que implica falta de respaldo popular y una imagen de partido parasitario, que sobrevive en la escena nacional, que se sustenta en el protagonismo personal y mediático de quienes tienen representación en el Congreso de la República.

Hecha la introducción anterior, para entrar en materia, creemos que una reforma estatutaria no es simplemente la solución para la agonía que vive el partido. Se necesita en principio, un cambio de actitud de la clase dirigente. El dirigente como individuo que pertenece a un partido, a una comunidad política, debe  tener la capacidad de renunciar a parte de sus intereses personales  en pro de objetivos comunes que favorezcan al colectivo, en el corto, en el mediano y en el largo plazo. En ese contexto, el trabajo a largo plazo, la previsión, la planificación, la visión -y por ende construcción- del futuro es lo único que garantiza el éxito.  

Con un Comité Político conformado por respetables ancianos que si bien cumplieron un papel importante en la historia del partido, están hoy fuera de su tiempo y pueden tener voz pero no voto para decidir por un futuro que no les alcanza. Con un Comité Político, conformado por ex dirigentes que como parte de la cúpula, tienen una percepción burocrática del quehacer político interno, poco es a lo que se puede aspirar y hacer. Se necesita un Comité Político, que haga las veces de un congreso, elegido por el voto popular, con gente que tenga futuro político, capacidad  de diseñar, de articular, de dirigir y representar a regiones, con las que tendría que estar en contacto permanente para trasladar y articular decisiones políticas.

En la era de las comunicaciones, en un país que pugna a trompicones por la descentralización, habría que capacitar dirigentes; monitorear, asesorar, diseñar estrategias políticas internas, para tener presencia mediática en provincias y capacidad de reacción frente a las coyunturas regionales, que eviten que oportunistas, recién llegados o mercaderes de la política, compren candidaturas. Se debe igualmente, descentralizar el nivel de las decisiones políticas, en medio de mecanismos de control para que no se de el grosero y grotesco caso de Ancash, donde el partido termina apoyando la elección de un delincuente como Presidente Regional, con un Secretario General Nacional y un Presidente que simplemente miran a otro lado.

En estos años, a lo largo de estas paginas, hemos propuesto formulas de financiamiento partidario, de las que nos ocuparemos en otro momento, pero que nacen desde la simple formula de cobrar cinco o diez soles mensuales por militante, que le asegure capilla y cajón para su fallecimiento o la creación de empresas, bajo el principio que quien tiene técnicos para gobernar, puede tener los técnicos para crear sus propios ingresos, sus propias fuentes de financiamiento.  Mediadas como estas, que habría que experimentar, generarían sin lugar a dudas, una buena imagen en la opinión pública y eso ya es bastante en un país donde los partidos están desprestigiados. Adicionalmente a lo anterior, se deberían implementar cursos de capacitación pagados -que para provincias podrían ser virtuales- como requisito para ser dirigente. 

Cargos como el del Defensor del Afiliado, que en sus tres últimas gestiones han sido patentes de corzo para el figurettismo, el silencio cómplice y la mediocridad con poder, podrían ser entregados a ciudadanos respetables y de reconocido prestigio, que sean garantía de independencia. Sin institucionalidad, con un partido en el que lo único que importa son cuotas de poder, cargos como este ejercidos por militantes sin brillo o con intereses marcados, no sirven para nada. En esa dinámica es tal la cantidad de leguleyadas, de transgresiones impunes al estatuto y a las leyes nacionales -cometidos en los últimos años- que se hace necesario un convenio con el Colegio de Abogados de Lima, para consultar decisiones que en ejercicio democrático deberían facultar a cualquier militante a hacer uso de los citados mecanismos. Si se sigue la política del copamiento, del nombramiento del incondicional para favorecerse en lugar de la meritocracia, se va a seguir dando vueltas en círculo, alrededor de la crisis partidaria.

Con estas breves lineas hemos querido simplemente acuñar algunas ideas, generalidades si se quiere, pero que nacen de la necesidad de graficar que el ser proactivo, es actuar para provocar el cambio deseado. Que el ejercicio del poder implica la existencia de una razón, de un conjunto de ideas y valores en virtud de la cual se va a definir un objetivo, de construir el futuro deseado. Todo lo que vaya en contra de esos lineamientos es simple ilusión, demagogia, onanismo político. 

Sin romper con la dinámica actual, manteniendo  el orden y los privilegios existentes no hay cambio posible. Y no lo hay porque en las elecciones que llevaron a Mesías Guevara al poder, tampoco hubo proyecto político ni debate de ideas. En lugar de buscar nacer de nuevo, de construir realmente las bases de un partido moderno, de un partido de futuro. Todo fue "Comida China", que gusta, que llena al momento, pero que  se digiere rápidamente.